Reorganización en Salud: Qué pasa con el Instituto Nacional del Cáncer

Reorganización en Salud: Qué pasa con el Instituto Nacional del Cáncer

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El gobierno argentino ha anunciado una serie de cambios significativos en el sistema de salud, incluyendo la creación de la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES) y la absorción del Instituto Nacional del Cáncer (INC) por parte del Ministerio de Salud. Estas medidas, oficializadas a través de decretos publicados en el Boletín Oficial, buscan, según el gobierno, optimizar la gestión y reducir la burocracia en el sector.

¿Qué implica la absorción del Instituto Nacional del Cáncer?

La absorción del INC implica que sus funciones pasarán a ser gestionadas como una unidad organizativa interna dentro del Ministerio de Salud. Según fuentes oficiales, esta medida no afectará la continuidad de los programas ni del equipo profesional que los lleva adelante. El objetivo principal es simplificar el encuadre organizativo para mejorar la gestión y la eficiencia de los recursos.

El INC ya venía operando con personal, presupuesto y líneas de trabajo dentro del Ministerio, por lo que la absorción formaliza esta situación. El gobierno asegura que esta reorganización no interrumpirá la importante labor que el instituto realiza en la investigación, prevención y tratamiento del cáncer en Argentina.

Creación de la Administración Nacional de Establecimientos de Salud (ANES)

La ANES centralizará la gestión administrativa, financiera y jurídica de cinco hospitales nacionales: Baldomero Sommer, Alejandro Posadas, Ramón Carrillo, Laura Bonaparte y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica del Sur. Esta medida busca corregir, según el gobierno, “graves irregularidades en los procesos de licitación, servicios tercerizados y compra de insumos” detectadas en auditorías recientes.

Si bien cada hospital mantendrá una Dirección Ejecutiva Médica particular, la ANES concentrará los procesos de compras y licitaciones, buscando garantizar una administración pública más transparente, ágil y de alta calidad. Se espera que esta centralización permita optimizar los recursos y mejorar la eficiencia en la gestión de los hospitales.

Próximos pasos

La ANES comenzará a funcionar formalmente de inmediato, pero se ha establecido un plazo de seis meses para adaptar la estructura de cada hospital al nuevo formato de administración. El gobierno ha asegurado que se priorizará la continuidad de la atención y la calidad de los servicios de salud durante este proceso de transición.

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