Milei y J.P. Morgan: ¿Plan Brady para rescatar la deuda argentina?
El gobierno de Javier Milei, en un movimiento sorpresivo, ha designado a J.P. Morgan Chase como banco estructurador para una operación de recompra de bonos soberanos. Esta iniciativa, que se asemeja a un "Plan Brady" moderno, busca aliviar la carga de la deuda argentina y reducir el riesgo país.
¿En qué consiste la estrategia?
La operación se financiará con préstamos de organismos multilaterales, lo que implica un cambio de acreedor. En lugar de inversores privados, los bonos serán recomprados con fondos provenientes de instituciones internacionales.
¿Qué bonos se recomprarán?
Se espera que el gobierno se centre en los bonos Globales 2029 y 2030, dos de los títulos públicos más negociados y con vencimientos más cercanos. Según la consultora 1816, estos bonos suman US$ 9.100 millones en circulación en manos del sector privado.
Impacto en el mercado
Tras el anuncio del secretario de Finanzas, Pablo Quirno, los bonos experimentaron un aumento en su valor. Sin embargo, el total de bonos soberanos en circulación asciende a US$ 78.700 millones de valor residual, con un valor de mercado de aproximadamente US$ 48.800 millones.
¿Un nuevo "Plan Brady"?
La comparación con el Plan Brady de los años 90 es inevitable. Aquel plan, diseñado para resolver la crisis de la deuda latinoamericana, también involucró la reestructuración de bonos y el apoyo de organismos multilaterales. Si bien existen diferencias, la estrategia actual del gobierno de Milei busca un objetivo similar: reducir la carga de la deuda y mejorar la sostenibilidad financiera del país.
Sin embargo, persisten interrogantes sobre la efectividad a largo plazo de esta medida y su impacto en la economía argentina. La dependencia de financiamiento externo y la necesidad de generar confianza en los mercados son desafíos clave que el gobierno deberá enfrentar.