¡Peligro viral! Desafío 'Run It Straight' causa tragedia en Nueva Zelanda

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Un peligroso desafío viral conocido como 'Run It Straight' (corre en línea recta) está generando preocupación en Nueva Zelanda y Australia, luego de que un joven de 19 años perdiera la vida tras sufrir una grave lesión en la cabeza al participar en esta arriesgada práctica.

El juego, popularizado a través de redes sociales como Instagram y TikTok, consiste en que dos personas corren el uno hacia el otro y chocan de frente sin ningún tipo de protección, simulando un placaje de rugby. La víctima, residente de Palmerston North, fue hospitalizada el domingo y falleció el lunes por la noche.

¿Qué es 'Run It Straight' y por qué es tan peligroso?

'Run It Straight' se ha convertido en una tendencia preocupante, especialmente en países con una fuerte cultura de rugby como Nueva Zelanda y Australia. Los participantes a menudo compiten por premios en efectivo, lo que aumenta la peligrosidad y el incentivo a participar sin considerar los riesgos.

La policía neozelandesa ha emitido un comunicado instando a la precaución y advirtiendo sobre los graves riesgos de seguridad asociados a este tipo de competiciones. Expertos neurocirujanos han comparado esta práctica con un deporte de combate, alertando sobre el alto riesgo de conmociones cerebrales y otras lesiones graves.

Recientemente, en Auckland, dos participantes quedaron inconscientes y requirieron atención médica tras participar en un evento similar. Estos incidentes resaltan la necesidad de concientización y la urgente intervención de autoridades y plataformas de redes sociales para detener la propagación de este peligroso desafío.

Las redes sociales y la viralización del peligro

La rápida difusión de videos y contenido relacionado con 'Run It Straight' en plataformas como TikTok e Instagram ha contribuido significativamente a su popularidad. Es crucial que las plataformas tomen medidas para regular y moderar este tipo de contenido, protegiendo así a los usuarios, especialmente a los jóvenes, de participar en actividades que pongan en riesgo su salud y seguridad.

La tragedia en Nueva Zelanda sirve como un llamado de atención sobre los peligros de los desafíos virales y la importancia de priorizar la seguridad por encima de la popularidad en redes sociales.

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