Battaglia Revela Tensiones en Boca: ¿Quién Decidía Quién Jugaba?
Sebastián Battaglia, ex director técnico de Boca Juniors, ha vuelto a encender la polémica al revelar detalles sobre su conflictiva relación con el Consejo de Fútbol liderado por Juan Román Riquelme. En recientes declaraciones, Battaglia insinuó presiones e injerencias en la conformación del equipo, particularmente en lo que respecta a la inclusión de Alan Varela, hoy figura destacada en el Porto y convocado a la Selección Argentina.
El Cuestionamiento a Varela: ¿Decisión Técnica o Internas Contractuales?
"Algunos me llegaron a cuestionar por qué Varela tenía que jugar", afirmó Battaglia, dejando entrever que su decisión de alinear al joven mediocampista no era bien vista por todos dentro del club. En aquel momento, Varela atravesaba un conflicto por la renovación de su contrato, lo que lo había relegado al equipo de Reserva. Sin embargo, Battaglia apostó por él, decisión que, según sus palabras, generó tensiones internas.
Cascini Responde: ¿Desagradecimiento o Diferencias de Visión?
Las declaraciones de Battaglia han provocado reacciones, entre ellas las de Raúl Cascini, ex miembro del Consejo de Fútbol. Cascini acusó a Battaglia de "desagradecido" por haber recibido la oportunidad de dirigir al primer equipo. Battaglia, por su parte, reconoció su agradecimiento, pero señaló que las diferencias de pensamiento terminaron precipitando su salida.
Un Secreto a Voces Confirmado
Las revelaciones de Battaglia confirman un rumor que circulaba desde 2022: que el Consejo de Fútbol prefería a Esteban Rolón en lugar de Varela. La decisión de Battaglia de insistir con Varela fue interpretada como una rebeldía y contribuyó al deterioro de su relación con la dirigencia.
- El Contexto: Tensiones internas, diferencias contractuales y presiones por la conformación del equipo.
- El Protagonista: Alan Varela, hoy figura destacada en Europa y la Selección Argentina.
- La Polémica: ¿Quién tomaba las decisiones en Boca? ¿El técnico o el Consejo de Fútbol?
El debate sobre la injerencia de los dirigentes en las decisiones técnicas vuelve a estar sobre la mesa, poniendo en tela de juicio la autonomía de los entrenadores y la gestión del fútbol en Boca Juniors.